no dudaría en recomendar este hotel para una noche,

hermoso palacio, encantador restaurante, perfectamente ubicado para explorar la zona con una atención al cliente sobresaliente que me hizo sentir como en casa y recomendó lugares increíbles para visitar.

Estoy absolutamente satisfecho.

Efectivamente se escucha todo de otras habitaciones.

El desayuno fue un gran comienzo para el día, pero

hubo momentos en que el lugar se sentía un poco ruidoso, especialmente por la noche. Sin embargo, la belleza del palacio y la atención del personal compensaron esta pequeña molestia. La habitación era espaciosa y la decoración muy cuidada.

Al llegar, una boda invadió la tranquilidad, y aunque el lugar es bonito, el ruido era inaceptable. Además, en una suite tan cara, esperaba un pequeño detalle como una botella de agua gratuita, pero nada. La insonorización es pésima, se oye todo. Casi escribo una buena crítica, pero no pude.

Palacete precioso, decoración cuidada, habitaciones amplias y regias.

El pueblo es prácticamente muerto, ¡una piscina sería ideal ya que no hay nada abierto en la tarde!!! Además, deberíamos poder disfrutar de algo más que su iglesia. Distancias en coche a lugares decentes son demasiado largas.

Un lugar encantador. Decoración excepcional, habitaciones amplias y cama muy cómoda. Ideal para hacer senderismo por la zona. El único inconveniente fue un mal olor en la habitación, quizás del desagüe. Aún así, lo recomendaría sin dudarlo.

Un palacio con historia impresionante y un restaurante que ofrece platos excepcionales, como el cordero a la brasa. Perfecto para una escapada.

me sentí realmente bien recibido, no me puedo quejar

desayuno casero impresionante que marca la diferencia

relación calidad-precio, limpieza

ducha que se moja

La habitación era espaciosa y acogedora, y el desayuno con zumo de naranja recién exprimido fue un gran inicio para el día. Disfruté del jacuzzi y del jardín, perfectos para relajarme después de un día ajetreado. Solo comentaría que el ruido de una boda fue algo que interrumpió la calma, aunque no afectó mi impresión general, lo recomendaría sin dudarlo. 😊

Tuve una agradable estancia en un pequeño palacete con atención cercana y un restaurante que ofrece platos de calidad. La habitación era cómoda, pero la insonorización puede mejorar, especialmente por ruidos de eventos. El desayuno destacó con opciones caseras, lo cual fue un buen detalle. Aun así, el acceso al baño resultó poco práctico.

Tuve una experiencia agradable. Disfruté mucho del desayuno con café y platos típicos. El ambiente era relajado y el personal amable. Paseé por la zona y encontré rutas para hacer senderismo y el café fue un buen regalo después. La habitación tenía una buena vista del jardín, lo que contribuyó a mi estada. El servicio fue bueno y eso hizo que me sintiera en casa.

Lo único negativo fue el ruido proveniente de otras habitaciones. La insonorización no es la mejor y eso interrumpió un poco mi descanso.

Hospedería Palacio de Casafuerte es como un cuento de hadas hecho realidad, con su bello edificio del siglo XV que me hizo sentir como si hubiera viajado en el tiempo. El restaurante es un verdadero festín. el cordero a la brasa es tan delicioso que desafía las leyes de la gravedad, haciendo que mis pies dejen de tocar el suelo. La tranquilidad del jardín mientras disfrutas de un café es más relajante que un spa de lujo.

El entorno es algo tranquilo.